«El otro día, en una entrevista de selección, el entrevistador me dijo que era demasiado mayor para el puesto», me contaba un candidato casi avergonzado.
Si ningún seleccionador se atreve a descalificar candidatos por su género o por su raza ¿por qué sí se atreven todavía a discriminar por edad? No predice la competencia, no predice el compromiso, y ni siquiera predice si vamos a vivir más allá de mañana.
Un estudio de Generation (una ONG que estudia cómo ayudar a las personas desempleadas o subempleadas) muestra que los seleccionadores en general tienen una percepción negativa de los candidatos de más de 45 años frente a los de 35-44 años porque:
♦ 38% creen que no son capaces de adoptar nuevas tecnologías
♦ 27% piensan que no son capaces de aprender nuevas habilidades
♦ 21% creen que no son capaces de trabajar con empleados más jóvenes
¡Falso! En ese mismo estudio, los empresarios que emplean a personas de más de 45 años reconocen que tiene el mismo desempeño y potencial que los de 33-44 años.
El problema de la empleabilidad de las personas de 45 años no está en ellas, sino en los que deben seleccionarlas. Muchos entrevistadores se han formado para evitar sesgos inconscientes de género, pero a la vista de los datos debería ser obligatorio que se formaran para evitar el sesgo inconsciente de edad.
Una última reflexión: El CEO medio de España tiene 50 años ¿por qué sus empleados deberían ser siempre más jóvenes?
Bueno, otra, quizá la última: Según el informe «The Coming Entrepreneurship Boom» de la Ewing Marion Kauffman Foundation, la tasa más alta de emprendimiento durante la última década se ha registrado entre personas con edad comprendida de 55 a 64 años.
Seguramente sorprenda que …
- John Pemberton, de Coca-Cola, tenía 55 años.
- Harland Sanders David, de KFC, 65 años.
- Ray Kroc, de McDonald, tenía 52 años.
Nos lo cuentan con más detalle en Emprendedores exitosos cercanos a los 60 años: Sí, existen… y son más de los que se imaginan.
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En Recarte & Fontenla siempre se ha apostado por la excelencia más allá de la edad o cualquier otro sesgo que reste diversidad a los equipos. En la crisis de 2008 se instrumentó una campaña en redes sociales con el hashtag #BienvenidosLos50, que desde entonces tiene continuidad con artículos como este.