«Se demandan primeros ejecutivos con experiencia y que sepan moverse en la incertidumbre, un contexto que, por otra parte, ha propiciado el regreso de las cláusulas de blindaje a la negociación salarial». Es la síntesis de la periodista Montse Mateos que con nuestro socio director Andrés Fontenla y otros expertos, ha elaborado el reportaje ¿Está usted entre los más buscados por los cazatalentos? en el diario económico Expansión.
Para nuestro socio, el actual contexto, surgido a partir de la pandemia, demanda directivos que aporten gran capacidad resolutiva, con resiliencia para abordar los grandes retos que se plantean, con dotes de organización muy eficiente de los recursos y al mismo tiempo una gran creatividad para resolver cuestiones complejas y saber intuir las tendencias de futuro. Todo ello con un gran empuje que permita tirar del carro acompañado de carisma y liderazgo para conducir a la empresa al siguiente nivel.
Perfiles directivos antes y después de la covid
Tal y como expone Andrés Fontenla, en el perfil precovid se valoraba más en los directivos la orientación estratégica, así como las relaciones institucionales, unido a aspectos como el análisis y la escucha activa. Son facetas que siguen siendo relevantes pero la emergencia de la situación ha puesto el énfasis en la eficiencia y en el cambio para seguir adelante. También es cierto que no todos los negocios están impactados de la misma forma, dado que algunos están en alza y otros están muy comprometidos.
Las posiciones más demandadas son las vinculadas con el desarrollo de negocio y la innovación dado el gran impacto que ha provocado el covid en muchas actividades económicas, que requieren de una reinvención. De forma simultánea, la posición de primer ejecutivo es más solicitada que nunca.
Aunque en España contamos con una excelente calidad directiva, la pandemia está siendo un gran motor del cambio, el cual apunta directamente a la alta dirección por su papel esencial en hacer posible la reinvención del negocio en los casos de mayor impacto, o bien en maximizar la ola de oportunidad que en determinados sectores se han beneficiado de la pandemia.
Sectores más beneficiados
Tienen una gran demanda el sector de servicios sanitarios en sentido amplio, abarcando las empresas farmacéuticas, dispositivos médicos, hospitales, suministros hospitalarios, estética y cuidado de la salud. Asimismo, el sector alimentación está teniendo un gran tirón, el sector primario, la restauración a domicilio, etc. Otro sector que está viviendo un repunte es el digital que ya estaba en alza, pero ha experimentado un espaldarazo en temas como el comercio electrónico, la inteligencia artificial, el análisis de datos, la ciberseguridad…
Por el contrario, los sectores que más se han visto afectados son la hostelería, el turismo y el retail, entre otros. Sin embargo, aunque en un primer momento se paralizó la contratación de directivos, a medida que la situación se estabiliza y se define el nuevo mercado con sus retos, las empresas de estos sectores están provocando cambios en sus directivos, bien mediante rotación interna o bien a través de la incorporación de fichajes que aporten una nueva forma de hacer las cosas.
Directivos más cotizados
La covid no ha dejado a nadie indiferente. De los directivos se requiere esencialmente un gran compromiso, y demostrar de lo que son capaces de una forma rotunda, porque ante una crisis de esta dimensión hay que arrimar el hombro y actuar. Es muy importante que tengan capacidad de adaptación, para lo cual hay que desaprender y volver a aprender. También se valora mucho el impacto que producen en otras personas bajo su supervisión lo cual les obliga a ser líderes que inspiren más que nunca. Por ejemplo, un directivo que haya sido protagonista de un gran crecimiento en un sector cambiante ya cuenta con una trayectoria de éxito que puede replicar en este momento de incertidumbre.
La negociación de la retribución es siempre un asunto crítico en la incorporación de un directivo y no ha cambiado sustancialmente en estos tiempos de pandemia. Sin embargo, hay un elemento que cobra especial relevancia y es el de navegar en la incertidumbre. Efectivamente para un directivo consolidado, el cambiar de proyecto y unirse a una nueva empresa en estos tiempos entraña un componente de riesgo que hay que compensar. Más que a salarios desproporcionados, que no son nunca una buena opción para la salud de la relación por ambas partes, observamos que se recurre más que antes al blindaje, que es una manera práctica de acomodarse y facilitar la toma de decisión para un cambio por parte del directivo. Y al mismo tiempo para la empresa no implica un mayor coste, siempre que la decisión sea la correcta.
De hecho, el apartado salarial es a medida de cada situación. Por lo general un cambio de posición para un directivo aunque estemos en pandemia, también se puede beneficiar de un buen paquete retributivo pues sigue aplicando la oferta y demanda.
La clave de las claves: buena reputación
No obstante, para ser atractivos a los ojos de los cazatalentos, lo más importante es gozar de buena reputación y tener una buena historia de éxito que contar. A grandes rasgos, somos nosotros los que buscamos a los directivos y no a la inversa. Mantenemos el contacto con los ejecutivos que ya conocemos o con los que vamos interactuando en el transcurso de nuestra actividad, si bien siempre estamos receptivos ante directivos que tengan una buena trayectoria.