2020 es uno de esos años que nunca olvidaremos. Un virus imposible de ver a la luz de nuestros ojos ha puesto el planeta patas arriba y a muchas personas frente al dolor y la muerte. A 22 de julio en el mundo han fallecido por covid 617.834 personas, de ellas 28.426 oficialmente en España. La diversidad de realidades es inmensa, muchísimas dramáticas, pero aun así estamos convencidos de que saldremos reforzados de esta pandemia.

Durante estos meses, hemos visto sobre todo cómo las cualidades que nos hacen más humanos han guiado nuestras decisiones. Y es que son tiempos de decisiones. No son momentos para la dilación ni la espera. En nuestro mundo, la selección de directivos, la actividad no ha cesado, todo lo contrario, contar con los mejores en el nuevo contexto ha sido la estrella polar de muchos de nuestros clientes. No es fácil, lo sabemos, pero no decidir también es una decisión si acaso más peligrosa que el posible error.

Con la mirada puesta en dotar y dotarnos de las herramientas y habilidades adecuadas para ser certeros en nuestras decisiones, nuestro equipo investiga de manera incesante y favorece la publicación de artículos que por nuestra pluma, hoy tendríamos que decir teclado, ven la luz en nuestro blog. Precisamente con esta intención, hemos seleccionado los que estos meses más nos han inspirado para tomar decisiones que en caso de no haberlos leído, los proponemos para estos días de calor y reposo:

  1. Resiliencia, el gran regalo de nuestra evolución.  La buena noticia es que somos resilientes por defecto. La historia de la humanidad nos cuenta cómo hemos sabido adaptarnos y evolucionar positivamente desde circunstancias durísimas, como las que estamos viviendo. Así que no nos dejemos engañar y hagamos lo que sabemos hacer: aprender y crear sociedades mejores apoyándonos en nuestra resiliencia… pero ¿qué distingue a las personas resilientes en el mundo directivo? Aportamos las cualidades de los líderes resilientes.
  2. ¿Eres eficaz? No son días para la ineficacia, ni para los errores – aclaro – sobre todo si no aprendemos con cierta celeridad. Los tiempos que vivimos nos exigen ser eficaces y qué mejor guía que la de  Peter F. Drucker, padre del management. Para él, lo que hace eficaz a un directivo es saber qué conocimientos necesita convertirlos en acción y conseguir que las personas con las que trabaja se sientan responsables de lograrlo.
  3. Buen juicio, ¿de qué está hecho? Los seis componentes básicos del buen juicio son aprendizaje, confianza, experiencia, desapego, opciones y entrega, según Andrew Likerman. En este artículo los analizamos uno a uno.
  4. Tiempo de valentía y de disciplina. Desde la valentía, el altruismo, el aprendizaje y la disciplina vivir con la incertidumbre como seña de identidad será más fácil. Al fin y al cabo, la vida es cambio, así que hagamos del cambio la excusa perfecta para aprender a dar lo mejor de nosotros mismos venga lo que venga y pase lo que pase.
  5. Imaginación al poder. Todas las crisis contienen las semillas de la oportunidad. Es probable que muchas empresas encuentren una segunda vida después de la pandemia, si logran mantenerse y aprovechan su imaginación. La creatividad puede parecer un lujo frívolo en una crisis, pero en realidad es una necesidad para construir el éxito futuro.

No son días fáciles pero precisamente por no serlos, las cualidades más positivas afloran en las mentes y corazones de los hombres de bien. Septiembre está a la vuelta de la esquina, un tiempo esperado en el que se fraguarán las oportunidades que muchas empresas y directivos han preparado para hacer realidad sus sueños.

 “Quiero que escuches lo que tu conciencia te manda a hacer, y vayas y hagas lo que tu conocimiento te permita. Luego, vivirás para ver que a la larga -a la larga, digo- el éxito llegará porque dejaste de pensar en él”. Del grandísimo Viktor Frankl, sin duda lectura recomendada para este verano y para cualquier momento vital.

Desde Recarte & Fontenla os deseamos un buen verano, con espacio a la desconexión imprescindible para retomar septiembre con toda la energía y creatividad que nos va a exigir.