En una tribuna publicada en Equipos y Talento Carlos Recarte, socio director de Recarte&Fontenla, plantea un asunto esencial: ¿Es mi puesto indestructible? Explica en este sentido que a lo largo de la historia los puestos de trabajo se han ido perdiendo y cómo han sido sustituidos por otros. «La aparición de las máquinas y el avance imparable de la tecnología han sido los principales causantes de la destrucción de los empleos más físicos o manuales. En la revolución industrial, por ejemplo, los artesanos o las lavanderas vieron sustituidos sus trabajos manuales por máquinas que podían hacer su trabajo más rápido, más barato y con una calidad más estable».
Añade: «Más recientemente, el desarrollo de la ingeniería robótica en la industria automovilística también ha contribuido a que las tareas con un mayor carácter físico hayan desaparecido, pero han ganado en relevancia otras posiciones, tales como I+D, Marketing, compras y ventas… Ahora mismo, la tecnología digital está revolucionando todos los sectores. En el negocio del entretenimiento por televisión, por ejemplo, plataformas como Netflix han propiciado un modelo de negocio totalmente distinto al existente, lo cual ha dado lugar a muchos puestos de trabajo relacionados con la gestión de las plataformas, los modelos comerciales, etc».
«Otro sector que está viendo el impacto de las nuevas tecnologías es el de la automoción, en el que hace tiempo que se habla del coche conectado, que cada hora envía a la nube 25 gigabytes de datos de todo tipo: cómo conduces, cómo funciona el motor, cuál es el tráfico, cuál es el clima… Esto, por un lado, genera una gran cantidad de datos que los fabricantes de coches deben interpretar para mejorar sus procesos y la experiencia de conducción. Pero, al mismo tiempo, también sirve para crear valor en otros sectores. Por ejemplo, las aseguradoras, que harán pólizas en función de los patrones de conducción (si conduces mucho, poco, por carretera, por ciudad…)», reflexiona.
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